Su sabor, textura y estética les hace parecer un dulce capricho, pero lejos de engordar lo cierto es que son ideales para el picoteo sano, gracias a su carácter antioxidante y detox.
Aunque las cerezas son ricas en carbohidratos (sobre todo fructosa) aportan una cantidad moderada de calorías (58,3 Kcal. por cada 100 gramos) y ayudan a disminuir la concentración de glucosa en sangre gracias a los antocianos que contiene.
Precisamente ese contenido en antocianos (flavonoides), que le da ese color tan característico y el ácido elágico que contiene supone una gran ayuda para combatir el exceso de radicales libres, lo que reduce el riesgo de padecer enfermedades cardíacas. Además, ayudan a combatir la hiperuricemia (ácido úrico-gota) y otras patologías como la artritis, gracias a sus hidroxicinamatos (compuestos fenólicos como los que contienen algunos vinos), que son antiinflamatorios y depurativos.
Son una excelente fuente de betacaroteno (provitamina A), que disminuye el riesgo de crisis cardíaca, aumenta la eficiencia del sistema inmunitario y se emplea como protector frente a la radiación ultravioleta. Contienen casi 20 veces más betacaroteno que las fresas o los arándanos.
Su contenido en Vitamina C y sus antocianinas hace que mantengan la piel, cabello y uñas fuertes para luchar contra los efectos dañinos de la radiación solar y el envejecimiento celular.
También son una buena opción para aquellas mujeres que prevén quedarse embarazadas, pues son ricas en ácido fólico, lo que ayuda a asegurar el desarrollo neuronal del bebé.
Las cerezas tienen un nivel alto de melatonina, de hecho son uno de los únicos alimentos que tienen una fuente tan alta de forma natural. Algunos nutricionistas recomiendan comer cerezas aproximadamente una hora antes de acostarse, para que la melatonina se libere y ayude al cerebro a prepararse para el sueño.
Y como guinda del pastel (nunca mejor dicho) cabe destacar que, tal como explica Marisol Guisasola en el blog Adelgazar Sabiendo, mejoran la vida sexual pues los antocianos reducen el riesgo de disfunción eréctil en los hombres y mejoran la respuesta sexual en hombres y mujeres.
Tus decisiones hacen la diferencia. Hoy tú eliges crecer y potenciar el crecimiento de otros. En tus manos está el camino de la vida.